El modelo de Ingelia

El modelo de Ingelia representa una oportunidad para convertir cada tratamiento de biowaste en un negocio rentable y sostenible

Materiales de entrada

La planta de Ingelia puede procesar cualquier tipo de residuos orgánicos. Gracias a la sostenibilidad de su tecnología innovadora, Ingelia garantiza una reducción del coste de tratamiento del 2o al 50% en comparación con los actuales estándares europeos.

El corto tiempo de la reacción (6-8 horas) permite evitar el almacenamiento de largo tiempo, contaminante y costoso de restos orgánicos. Adicionalmente, los restos orgánicos de entrada pueden ser procesado en una mezcla de residuos orgánicos, con el fin de ajustar la calidad del proceso de la planta.

La Planta

La planta es modular y, por tanto, fácilmente escalable, garantizando un tiempo de retorno de inversion corto en cualquier tamaño, de 2 a 30 reactores. La capacidad de un reactor es de 3500 Tn/año de resto orgánico seco.

El proceso es continuo y exotérmico, por lo tanto, el consumo de energía es inferior al 15% del contenido energético total del biocombustible obtenido. Además, los reactores no tienen partes móviles, por lo que el mantenimiento requerido es bajo y no costoso.

Los productos finales

El biocaebón producido es un biocombustible sólido de alto valor, rico en carbono e hidrógeno, pero también con un valiosos contenido de nutrientes. Esto garantiza una amplia y diversificada demanda del mercado, con un alto valor de venta (a partir de 170 € / t).

Gracias a la eficiencia del proceso, y a los sistemas de post-tratamiento incluidos en la planta, la calidad del biocarbón es homogénea y en línea con los estándares internacionales requeridos para biocombustibles y biofertilizantes.

La fracción líquida se puede utilizar tal como se recibe, después de la desalación y concentración, para fertirrigación de campos agrícolas. El gran interés en los nuevos biofertilizantes facilita la aplicación de este producto y garantiza una creciente demanda del mercado.